Amadas madres, abuelas, hermanas…
Hoy y para siempre…
Soltamos los recuerdos dolorosos que nos unen en aquellos actos, pensamientos y sentimientos… presentes en nuestro linaje femenino, donde están involucrados el linaje masculino mal aspectado, por el maltrato hacia nuestra esencia femenina en palabras, actos, pensamientos y sentimientos.
Lo Siento, Perdóname, Te Amo, Gracias…
Donde la obligación estaba por sobre el amor.
Donde la indiferencia era aceptada como algo “lógico” hacia nuestra tarea cotidiana.
Lo Siento, Perdóname, Te Amo, Gracias…
Cuando el descanso casi no existía, pues nuestro ritmo de trabajo era más allá de la salida y puesta del sol…
Lo Siento, Perdóname, Gracias, Te Amo.
Cuando el amor del hombre hacia nuestra esencia femenina era un acto para su satisfacción personal, olvidando nuestros sentires profundos de amor, nuestra entrega cotidiana, nuestro amor en silencio a pesar de la desvalorización, la indiferencia y la falta de amor…
Lo siento, Perdóname, Gracias, Te Amo.
Por las memorias ancestrales de todo el linaje femenino Familiar y más allá de él…
Lo siento, Perdóname, Gracias, Te amo.
Por la sanación total, por la liberación total.
De toda herida de ayer y de hoy.
Lo siento, Perdóname, Gracias, Te amo.
Hoy y para siempre…
Nos perdonamos, nos amamos en el respeto absoluto de nuestra esencia divina femenina,
para ser fuente viva de amor ilimitado.
Sanando todo resentimiento.
Perdonando la herida recibida.
Amando a todos por igual.
Lo Siento, Perdóname, Gracias, Te Amo.
Hoy y para siempre…
Renacemos en nosotras mismas en un nuevo linaje divino femenino donde la paz, el amor, la compasión y la misericordia.
Como lazos de sanación unen lo separado.
Cicatriza lo lastimado, suelta el rencor y la ira.
Renace en balance perfecto donde lo Femenino y lo Masculino son libres, sanos, complementarios, amantes del amor ilimitado.
Así es, Hecho está.
Autor: Ashamel Lemagsa
Fuente: ashamellemagsa33.blogspot.com.ar