Alguna vez te has preguntado, ¿por qué no puedo progresar en mi vida?, ¿tienes la sensación que hay un “algo” que te jala hacia atrás?, ¿qué te detiene?, ¿qué te impide?, ¿qué no te deja ser feliz, ser libre, recuperar tu poder? Los bloqueos energéticos, los cordones energéticos de personas fallecidas, apegos energéticos de relaciones o situaciones tóxicas o traumáticas en el transcurso de nuestra vida o vidas pasadas. La mejor y más efectiva manera de remover todo este tipo de energías toxicas es por medio de sesiones de energía sanadora de Reiki. Pero, ¿cómo entonces podemos transformar nuestra vida?
Empecemos primero por describir, ¿qué es Reiki? y lo que hace. La palabra Reiki está hecha de dos palabras japonesas – Rei que significa “Sabiduría de Dios o Poder Supremo” y Ki es “La energía de fuerza Vital”. De acuerdo a la Organización de Reiki, “Reiki es una técnica japonesa para reducir el estrés y la relajación que también promueve curación”. Esta técnica de sanación se proporciona por medio de imposición de manos. El objetivo es remover los bloqueos energéticos en nuestros chacras principales en nuestro cuerpo, raíz, sacro, plexus solar, corazón, garganta, ojo espiritual y corona. Cuando estos bloqueos son removidos estamos saludables, nuestro sistema inmune sube, recuperamos la paz, la felicidad y somos libres.
¿Cómo es que Reiki transformó mi vida? En Enero del 2019, acompañada de mi hermana, Lourdes, quien me sugirió el Reiki, tuve mi primera sesión de sanación. Tras una cuarta sesión transformó mi vida espiritual, y después de algunos meses, decidí tomar una clase de Reiki 1. ¿Qué me hizo tomar esa decisión? Realmente quería saber qué era eso tan hermoso y tan poderoso que me cambio mi vida, que me había hecho recuperar la FE y además me hizo dar cuenta que la felicidad no depende de nadie más pero de la persona que está frente a mi cuando me miro al espejo. Quería saber qué era esa “magia” que me había hecho soltar esa mochila llena de penas y angustias que venía cargando y acumulando por más de treinta años. Primero por la muerte de mi hermano en un accidente automovilístico, cuatro meses después por el asesinato de mi padre, quien era lo que yo más amaba en la vida. Después y con el paso de los años situaciones caóticas, desde relación muy dañina, hasta la “pérdida” de uno de mis hijos al formar parte de un culto religioso y romper toda comunicación con él. Todas estas situaciones traumáticas tuvieron sus consecuencias y una serie de problemas de salud. Cuando llegué a esa primera sesión de Reiki, llegué sin ovarios, sin útero, sin vesícula, con cuatro tornillos en mi espina, limitada de ciertos movimientos físicos y una abundancia de infelicidad y falta de amor propio.
Mi desarrollo espiritual y conexión con Dios fue paulatino. Semanas antes de tomar Reiki 1, empecé a practicar la meditación, pero los resultados no fueron muy alentadores. No había ni sentía conexión con Dios, no había concentración, los pensamientos de las tareas diarias me ganaban. No fue hasta el día de mi clase que pude sentir esa conexión. Después de la clase, empecé a desarrollar diferentes técnicas de sanación. Por ejemplo, entrar al cuerpo energético directamente de mis clientes, también, empecé a sentir la energía de las personas y por instinto propio, mi alma mueve y dirige mis manos, encuentro y remuevo bloqueos y cordones energéticos muy profundos y tóxicos de esta vida y vidas pasadas.
La transformación que hizo el reiki a mi vida me motivo a ayudar a otras personas dándoles esperanza para que se pueden sanar espiritualmente. La recompensa mas grande como sanadora es ver como las sanaciones de reiki han cambiado la vida de otras personas desde ayudarles a re encontrarse con Dios, encontrar paz y resignación al perder un ser querido y recuperar de dolores emocionales y físicos. Estoy lista pare emprender mi nueva travesía ahora como maestra de Reiki. Mi mayor satisfacción será compartir mis enseñanzas de sanación para que de esta manera más personas, sean beneficiadas al así mismas, sean libres y tengan una hermosa transformación de amor.
¡Date la oportunidad de conocer esta técnica holística que está siempre a tu alcance!
